Description
If you've just got off your plane, exhausted after a long flight, there's no better remedy than an airport transfer. If you don't want to decipher public transport maps or haggle with local taxis, you can use this service to take you to your destination directly from the airport. The professional drivers can track your flight and adjust the pick-up time if your plane is delayed to ensure the best possible service. To facilitate the meeting, the driver will be waiting for you in the arrival hall with a name card.
To simplify your transfer, please remember to note the following information in the "Airport pick-up information" section:
- Flight number
- Terminal and arrival time
- Number of passengers and number of bags
- Name to note on the sign
- Address of your accommodation
- Phone number (Whatsapp if possible)
If you also want a transfer for your return, please repeat these steps with the return information.
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How it works ?
We are concerned about making your browsing as easy as possible and we put emphasize on the transparency of our offer. Our service is really easy to use.
1 - Select your destination and book your tour
2 - You can check the status of your reservation via the "My reservations" section
3 - Chat and personalize your visit with your local guide via chat
4 - Enjoy the tour of your choice with your local guide !
What's our users says
Estambul es hoy una mezcla ancestral de culturas, idiomas y religiones que le dan un sabor único. Lo que sé ve, sé escucha, sé come, sé huele, completan él cuadro. El hecho de estar en 2 continentes la hace también muy particular. Resaltan la Basílica de Santa Sofía, la Mezquita Azul (llamada así por los azulejos azules de su interior) con sus seis minaretes, el Palacio de Verano (Dolmabahçe), la Torre del Gálata y desde luego el Palacio de Topkapi. Recorrer la Ciudad con un guía es imprescindible pues de otra manera sé pierde una cantidad de información muy valiosa que sin ella se demeritoria el valor de lo que se visita. Él esplendor del Palacio de Topkapi sé cuece aparte. El poder y la riqueza de los Sultanes Otomanos debió ser incalculable. Se dice que la flota de guerra Otomana fue pagada por el Sultán Abdul Aziz de su presupuesto personal y no es poca cosa porque era considerada la segunda en tamaño y poderío solo por debajo de la Inglesa. El tour nos llevó también a la Cisterna que penosamente estaba vacía. Otra experiencia lo fue el Gran Bazar. Lleno de gente, comercios y una serie de pasillos en los que es fácil perderse. Muy buen recorrido.